El casal Pere Quart ha acollit aquest dijous al vespre una nova edició dels debats organitzats per Entesa per Sabadell, que aquesta vegada ha tractat sobre la desobediència civil.
Sota el títol ‘La desobediència civil en els processos de canvi social’, l’historiador i especialista en Mahatma Gandhi Artur Domingo ha parlat d’un tema que ell considera “molt oportú” actualment. Domingo ha començat fent una petita introducció sobre grans personatges que han justificat, parlat i practicat la desobediència civil, com Martin Luther King o Nelson Mandela.
Després de fer una pinzellada sobre les característiques d’aquest moviment ha volgut equiparar la situació d’aquests personatges amb el context actual, explicant diversos motius pels quals a Catalunya es podria donar una situació de desobediència que seria legítima. “La desobediència pot ser i ha de ser una eina per Catalunya”, ha conclòs fermament.
Desobediència en les lluites
Per reflectir la importància de la desobediència civil, Domingo ha parlat dels moviments feministes que reclamaven el dret a vot, de la lluita per la igualtat dels negres a Amèrica i de la lluita que va protagonitzar Mahatma Gandhi, tres experiències històriques de desobediència en els processos de canvis socials i que, com ha dit ell, “demostren que la desobediència civil ha jugat un paper clau per aconseguir coses que no haurien passat mitjançant cap altra manera”.
Per acabar, Domingo ha explicat que actualment és un tema que encara està molt present ni que pugui semblar una cosa del passat. A mode de conclusió ha dit que “la desobediència és una eina que s’ha d’utilitzar per desbloquejar situacions, però també s’ha de combinar amb altres formes de canviar la legalitat”.
Després de la conferència, s’ha donat el torn de paraula al públic per a que fes les seves aportacions i valoracions mitjançant un debat que ha clos l’acte.
Está muy bien, Artur.
De todas formas, me pregunto ¿Qué tenemos en común los catalanes del siglo XXI con las situaciones de los indígenes en el Raj (los dominios imperiales británicos en lo que hoy es India y un puñado de países más), con los negros y otros en la Sudáfrica del apartheid, o con la situación de los negros en los estados sureños de los EEUU antes de 1965? Espacio respectivamente de la lucha de Gandhi, Mandela y King.
No, no desprecio la historia ni tampoco llamo a desmovilización alguna. Es más bien una voluntad de anclar en el presente objetivos y métodos.
1º Desobediencia civil es la práctica adoptada en nuestros días por la Plataforma que ha luchado y lucha contra los desahucios. También lo fue la resistencia a prestar el servicio militar (que se impuso a individuos podo favorables en principio a ello como Aznar). No es preciso buscar ejemplos tan exóticos.
2º En los tres ejemplos que se indican hemos mitificado a reales o supuestos héroes impolutos. Soy de quienes piensan que la historia la hacen los pueblos, los movimientos colectivos. En tales movimientos no está todo tan impoluto. Ni lo está en cuantos rodeaban a la esposa de Mandela, ni en algunas de las respuestas que se dieron en los EEUU, ni el movimiento en la India colonial fue tan “puro”. Allí la excitación de las identidades colectivas acabó con una masacre entre vecinos (de uno a dos millones de muertos) que precipitó la separación de India y Pakistán… R. Tagore y otros, racionalistas frente a las fugas místicas de Gandhi, ya preveían de algún modo los males de ciertas fundamentaciones en lo emocional de ese maestro tan estimado… (animo a leer varios escritos no difíciles de encontrar del premio nobel Amartya Sen, que opta decididamente por Tagore frente a Gandhi).
Obviamente no estoy mezclando a esos personajes históricos muy estimables con los payasos de tiempos recientes que han seguido cursillos en ONGs norteamericanas que, presuntamente, buscan el empoderamiento mediante la lucha pacífica… individuos que han tenido bastante que ver con los muertos (por fuego amigo, de su propio bando, para culpar a terceros) en los países bálticos y más recientemente en la plaza Maidan de Kiev. Quien desee tener referencias precisas sobre esos episodios vergonzosos le recomiendo una búsqueda en la red de artículos del también historiador y periodista catalán Rafael Poch de Feliu, que lleva varias décadas por esos países que otros sólo visitan “cuando truena”.
3º si de lo que se trata es de asemejar nuestra situación como pueblo (Catalunya s. XXI) a esas situaciones antes citadas, buscando mística… mejor miramos con serenidad nuestra realidad material e institucional (llibertades…) y la de nuestros vecinos (catalanes con opiniones distintas, u otros) . No sea que alguien pierda el norte y nos monte un Maidán.